La honesta sensación de la mano firme sobre el pecho
La ceremonia constante de los silencios
El pequeño complot de las miradas furtivas
La desidia y el lento tormento de los adioses
El vértigo de lo que se desliza para nunca mas volver
La repetida necesidad de sentir el crepúsculo y su noble nostalgia
Los amargos instantes de la infancia
La enferma constancia de las mentiras
Las ausencias
Las extrañezas
Lo vertical del odio y la neutralidad de la indiferencia
El amor aborrecido
Las vergüenzas y su constancia
Los instantes de fuga
Las inermes sensaciones del desamor
El abrazo no contemplado
Las caricias derrotadas
Los rechazos inútiles
El momento decepcionante
La inutilidad del beso
Lo impúdico
Lo prostituido
La frontera de lo sexual
El limite de los encuentros
El gesto cínico
Y las verdades escupidas
El fraude
La desilusión
La sombra sucia de alguna ironía
Las ceremonias brindas a a lo inmundo
El gesto perdido
Los gestos perdidos
El fracaso del ensueño
El vaso roto y la mano herida
El vomito de la culpa
Y el vomito de todas las culpas
Y el vómito de otra culpa negada
El enemigo al acecho
La lanza en la punta del corazón
Las cadenas rígidas
La compulsión inquietante de nada
Lo incierto y lo mórbido
La tenebrosa obscuridad y además indeseada
El ángel siniestro
La descomposición paulatina e irreverente de todas las hojas de Otoño
El sueño híbrido
El niño herido
La batalla perdida
La espera rota
La desmedida espera
El inmerecido afecto
El sol sin luz y la luna negra
El sufrir del miedo y el miedo a sufrir
El tormento innecesario
Una montaña de mierda
Rios de espesa sangre
Un bosque de brujas — malditas brujas
La perfecta idiotez de mis ilusiones
El maldito rostro del Mal
La mortecina luz de un velorio de mala calidad
Y,
Mi dolor
Mi increíble dolor
De lejanías
De despojos
De restos
De huellas sin rumbo
La estrella apagada
El cielo desvirgado
La inconmensurable soledad de la soledad
El yo en fragmentos
Mi yo en fragmentos
El llanto de el único pájaro del mundo
El aplastamiento de las ideas y de los sentimientos
El sortilegio del arcángel caído
La caída de Luzbel
La perdida del Paraíso
Los fueros de hoy los fueros de mañana
El único instante del mundo
El grito del Abismo
La inutilidad de la caricia
El pago a la prostituta
El pago por la Amistad
La promesa rota
Las promesas rotas una y mil veces
La cercanía del horror
El suicidio de la compasión
La desconfianza prematura
El aborto del primer hijo
El aborto del último hijo
La cárcel de tu ignominia
El carcelero infiel
La cerradura oxidada
El Tiempo inconmensurablemente perdido
La llave perdida
La perdida
El penúltimo adiós y el último adiós
El último
Adios
El último instante de la Eternidad
La Eternidad me encuentra y yo digo por última vez algo que no pertenece ya a este mundo.
Un gran Silencio…
Jorge Garzarelli
La melancolía, lo que fue y ya no es, lo que duele y lo que quema, y esa cadencia metódica, regular, como fórmulas rituales que se repiten. Felicitaciones, Jorge, muy vivencial, muy humano
Carlos como siempre se nota tu erudiccion y humildad, las que ir juntas de la mano o del brazo (dependel de la hora del dia son una gran fortalaza en algunos seres humanos. muy humanos
Gracias por el comentario
Jorge, cada frase es un disparador emocional.
Para leer y releer despacio.
Algunas sentencias son difíciles de digerir, quedan en la garganta.
Gracias por compartir.
Maru, lo que queda en las gargantas como la tuya, sera atravesado con la dignidad que corresponde. Gracias por tus comentarios.
Es claro que fue escrito en tres dias en Calcutta antes de salir a trabajar con el grupo. Ya te contare los porques.